Enredado en mí mismo
Ya pasaron muchas horas, en que la noche me mira acurrucado con las hojas y la tinta. Buscando la manera de desenredarme en metáforas.
Intentando recrear situaciones en mi mente donde me hagas iniciar una nueva hoja.
Tantas páginas escritas, tantas palabras repetidas, muchas de ellas manchadas.
Me busco en la oscuridad, siguiendo el brillo de mi sombra, por detrás de mis fantasmas.
Escuchando mi silencio entre todo lo que grita, ahí donde los ruidos no hacen su labor.
Gritándote sin gritar, abriéndome en letras, notas, en muchas noches de hablarle a mi insomnio de vos.
Ya me doy pena, al verme arrojado en el rincón, sin darme permiso para arañar la realidad.
Como siempre, atrás de las miradas, sin el permiso a mirar.
Como siempre, tras la hoja, sin la posibilidad de hablarte.
Como siempre, resignado a tu partida, mi tristeza, nuestra distancia.
Como siempre escuchando el silencio del murmullo.
Como siempre caminando bajo la luz ocre de este camino de las desamistades.
Y sí, acá buscando tu cara en mis cielos, enredado entre metáforas que muchas ni yo las interpreto. Me cuesta entenderme, y por eso, cada vez me hundo más en esta desesperada búsqueda de una tinta, una persona nueva, para estas páginas tan vacias. Una tinta que me entienda, quizás aun más de lo que yo puedo.
Intentando recrear situaciones en mi mente donde me hagas iniciar una nueva hoja.
Tantas páginas escritas, tantas palabras repetidas, muchas de ellas manchadas.
Me busco en la oscuridad, siguiendo el brillo de mi sombra, por detrás de mis fantasmas.
Escuchando mi silencio entre todo lo que grita, ahí donde los ruidos no hacen su labor.
Gritándote sin gritar, abriéndome en letras, notas, en muchas noches de hablarle a mi insomnio de vos.
Ya me doy pena, al verme arrojado en el rincón, sin darme permiso para arañar la realidad.
Como siempre, atrás de las miradas, sin el permiso a mirar.
Como siempre, tras la hoja, sin la posibilidad de hablarte.
Como siempre, resignado a tu partida, mi tristeza, nuestra distancia.
Como siempre escuchando el silencio del murmullo.
Como siempre caminando bajo la luz ocre de este camino de las desamistades.
Y sí, acá buscando tu cara en mis cielos, enredado entre metáforas que muchas ni yo las interpreto. Me cuesta entenderme, y por eso, cada vez me hundo más en esta desesperada búsqueda de una tinta, una persona nueva, para estas páginas tan vacias. Una tinta que me entienda, quizás aun más de lo que yo puedo.
buenisimo...me mato el final...muy muy bueno
q t mejores
anis.
Escrito por
Conelmate |
16/1/07 4:03 p. m.
como siempre lo digo buenisimo.. posta me encanto todo.. muy bien hecho... espero que te mejores .. y gracias por firmarme.. me gusta que te guste lo que escrivi... besotes
Escrito por
flor |
16/1/07 10:31 p. m.
guauuu...sin nada q opinar.
Buenísimo.
Escrito por
Pezave |
17/1/07 2:06 p. m.